Aveces la mente

Aveces la mente, se posa en reversa; Parece instalarse, sin porte a la inversa. Nuestros pensamientos, parecen vagar; No tiene sentido, el vivir y el estar. Y es ese el momento, en la dualidad; Que el hombre divino, se debe parar. Saber que hay caminos, no hay sombras que amar; Más bien sacudirlas, y echarse a volar. Aveces la mente, se atreve a mandar; Dictar las acciones, alzando el errar. Recuerda que tú eres, chofer de tu andar; La luz de tu alma, te invita a soñar. Controla tu mente, medita al pensar; La fuente del Uno, te ayuda a vibrar. Walter Daniel Tomeo